
Mi alma pretende transitar ese camino, donde se experimenta lealmente una actitud vital, una vivencia interior, un deseo inexpresable, han surgido junto con todos los genios, inevitablemente todos los demonios.
Quiero perderme en este monologo pleno de deseos, con la altivez desdeñosa a los extraños adornos al lenguaje, abandonado a las sensibilidades mas sutiles para impregnarme de todas tus miradas, recreando en estas la imagen de la musa que me aparta del mundo, con esa indescriptible irradiación de tu Aura, extasiado, te contemplo me atrevo a acariciar en tus aromas las bondades del mundo , en mi mente se yergue silenciosa la imponente y colosal imagen de la voluptuosidad y sus destellos fugaces, divinizada, recreando un rito apoteótico al amor humano.
Tus miradas me hacen sentirme impregnado de exóticos inciensos que con sus emanaciones llenan el templo erigido a mi espíritu. Contemplo como se dibuja luminosa en el espacio tu espléndida belleza.
La belleza contiene la magia de todos los ideales, elevándose el alma hasta lo inefable, donde todas las artes conjuran un radiante encantamiento que seduce a todas las inteligencias.
El amor sublima las distancias de todos los mundos, proyecta hacia lo Indescriptible, las realidades se evaporan, mi corazón se estremece.
En el silencio de la noche, como ánimas en pena acuden inevitables las palabras que nos convierten en entidades etéreas recurrentes, se materializan las formas y recurren las ideas en las que no tienen cabida los delirios. Adivino tus pensamientos, el lenguaje de besos, de manos parlantes, de caricias que derriten las sedas, que cambian los estados de la materia, y desaparecen las formas, y los continentes.
Llegas flotando mientras escudriñando el tiempo, estoy perdido en un combate con el mas implacable de los enemigos, que haciéndome saber prepotente que nada lo detiene, me acorrala e intimida y me grita furioso que nada puede evitar que se diluyan nuestras almas en las intimas cápsulas de la individualidad humana.
Por instantes perdidos, nuestras naturalezas hacen el lenguaje.
Los escalofríos se apoderan de nuestras pieles, de todos los pensamientos, el tiempo se detiene para quienes aman pues sus latidos salen del ritmo acompasado del universo, soy un invitado permanente a una profunda y total introspección emocional , me vuelvo liquido, me diluyo en esa dimensión en la que gravitan sutiles los suspiros.
tus ojos generosos extravían mi cordura, me desnudan el alma, y desplazo mi mente a las platónicas islas de los perfectos amores, mientras hago mis confesiones en nuestra intimidad, te quedas repentinamente dormida y te pierdo momentáneamente en un lugar oculto para mis deseos. Seducido por el éxtasis a que convoca el lenguaje de tu cuerpo, acosado por mis ansias y acariciado por tu mirada. me subyuga tu aroma y todo parece detenerse, me domina totalmente tu sugestiva presencia, saboreo tu aliento siento tu respiración pausada y envolvente y tocan tu cuerpo desnudo mis pensamientos, dominado por tu magia, arropado por tus velos, me sumerjo en el colorido estanque de tus movimientos, te vuelves espejo para el reflejo de mi conciencia, amor fantasma, perfecta y bella delicada diosa que surge súbitamente de algún reservorio del deseo. Y así, ha quedado dibujada tu silueta sensual en el fondo de todas mis ansiedades, te vuelves esa delicada flor que abriendo sus pétalos ha revelado todo su perfume. Llega con la mañana el acto final, desencadenando una sinfonía cósmica que me hace pensar que en la vida no he sido un cupido, lanzando flechas de fuego a corazones de hielo.
Guillermo Preciado Juárez
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